Luis Cancela, miembro fundador del Club TOP F&B
En multitud de ocasiones he escuchado o leído que los jefes sufren una “soledad” asociada a sus puestos, derivada de sus responsabilidades con la empresa en donde trabajan o de las que son dueños.
Me gustaría poder hacer una pequeña reflexión sobre este tema.
Cuando hablamos de liderazgo, se nos llena la boca diciendo que los buenos líderes son aquellos que:
- Crean equipo
- Son humildes
- Dan ejemplo
- Comparten ideas
- Dejan equivocarse
- Etc.
Creo de verdad en todos atributos de los líderes que acabo de mencionar.
También se suele decir que se puede ser líder y jefe a la vez, pero después nos encontramos con otra de las “verdades” asumidas por todo el mundo: que el jefe vive en soledad.
Y yo me pregunto: ¿no es una incongruencia?
Si un jefe es líder creo que nunca debería estar solo, ni vivir en soledad, puesto que debería de contar con su equipo para tomar todas las decisiones importantes.
Si un jefe es líder, debería de confiar en su equipo para generar sinergias y procesos que lleven a la empresa a tener mayores beneficios.
Si un jefe es líder, debe de asumir que algunas decisiones no serán acertadas, pero que si se han tomado en conjunto hay que defenderlas, ser consecuente y no “escurrir el bulto”
Lectura recomendada: Ya lo advertí, el F&B no es un bombero.
Si un jefe es líder, debe de tener claro que dentro de su equipo habrá gente que sea más inteligente que él, que habrá gente que sepa más que él en algunas especialidades… y debería de fiarse de ellos, pues están ahí para ayudar, para apoyarlo en lo que necesite y en donde son grandes.
Si un jefe es líder, debe de ser humilde. Creo que dar las gracias por un trabajo bien hecho es un buen punto de partida.
¿Soledad o egocentrismo en el F&B?
Muchísimos de nosotros, que tenemos más o menos responsabilidades en nuestras empresas y con equipos a nuestro cargo, debemos hacernos estas reflexiones.
Si se cumplieran todos los supuestos que acabo de exponer, la cuestión de que el jefe vive en soledad sería una farsa.
Si diera el caso de que el jefe quiere ser líder, pero a la vez no es capaz de cumplir con estos atributos que he mencionado estaríamos hablando de algo muy diferente. En este caso nos encontraríamos con algo que muchos hemos padecido alguna vez y es ¡EGOCENTRISMO! que yo lo traduciría a ese miedo o inseguridad por parte del jefe a ser visto como alguien prescindible, alguien no influyente… o lo que es peor: alguien al que no te quieres parecer.
Ahí dejo esta reflexión. No espero que todos la compartamos, pero en la diversidad está el aprendizaje.